El Divorcio

El divorcio (Mateo 5:31,32).

Mat 5:31 »También hace mucho tiempo Moisés dijo: “Si alguno ya no quiere vivir casado con su mujer, déle un certificado de divorcio”.
Mat 5:32 »Pero ahora yo les digo que el hombre sólo puede divorciarse si su esposa tiene relaciones sexuales con otro hombre. Si se divorcia de su esposa por otra razón, la pone en peligro de cometer ese mismo pecado. Si esa mujer vuelve a casarse, tanto ella como su nuevo esposo serán culpables de adulterio.

     Este tema es similar al anterior (el adulterio), pues aquellos que están casados, ya sea por la ley o por la Iglesia, no pueden divorciarse si quieren hacer la voluntad de Dios, a menos que uno de los dos haya estado en adulterio, pero esto también impide que puedan volver a casarse, a menos que alguno de los dos quede viudo, porque si alguien que esta casado, se ha divorciado de su pareja, para casarse con otro u otra, estarán en adulterio ante los ojos de Dios, esto es tanto para hombres, como para mujeres.

    Antiguamente muchas veces los hombres le pedían divorcio a sus mujeres simplemente porque no les gustaba algo de ellas y las dejaban desamparadas, por eso se hizo esta ley.